Nos encontramos en el periodo de cicatrización y parece que se han renovado las ilusiones por el fútbol en Albacete al crear un proyecto para enganchar a más afición joven . Los niños en Albacete son casi todos del Madrid o del Barça por lo general y el objetivo es crear afición en las nuevas generaciones para que tengan el gusanillo de ver a su equipo cada semana. Si se consigue el ascenso y se vuelve a la segunda división doblando el número de espectadores será más fácil consolidarse.
En cuánto al cuerpo técnico, también se ha visto una nueva estructura. Se gana al tener un manager general, la confección de la plantilla la realiza él mismo, y no sucederá que lo que ficha el presidente no le gusta al entrenador.
El equipo ha tenido el objetivo siempre en mente, jugando con humildad y nunca creyéndose superiores al jugar con equipos que tienen menos historia. Se ha visto a un Albacete regular, nunca se llegó a tener una racha grande de partidos ganados. Hemos vistos partidos feos, pero no se podía fallar más y la obsesión era no dejar escapar esa cuarta plaza y esa obsesión a veces nos hacía marcar. No siempre es bueno obsesionarse y la mayoría de las victorias se han producido por la mínima, el mínimo descuido podía perjudicar. El querer siempre se ha visto reflejado en los jugadores y el poder no te lo puede asegurar nadie.
Gran participación en la Copa del Rey, eliminando al Atlético de Madrid, actual campeón de la Europa League y plantando cara al Athletic de Bilbao. De momento las eliminatorias no se nos han dado mal y hemos sabido jugarlas.
El proceso de recuperación sigue y el club puede lograrlo, es difícil salir de la Segunda División B, pero afición y club van cogidos de la mano. Albacete ciudad de buen fútbol, han pasado buenísimos jugadores y técnicos reconocidos a nivel mundial, ¿Por qué no volverán a pasar por aquí?
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